En el andar de la vida, el ser humano puede toparse con circunstancian y peligros que le dañan desde muchos frentes; desde el ámbito emocional, financiero, amoroso, laboral, social y familiar, con esto puede verse comprometido y en problemas, causándole en su existencia pesares, amarguras y dolor.
Para evitar estos daños, debemos estar preparados, confiar en la fuerza interna, inteligencia, recursos, relaciones y en los aspectos que nos fortalecen. Todo esto sin lugar a dudas es necesario, pero no hay que descuidar a Dios y su perfecto accionar en nuestras vidas, el cual puede reconfortarnos desde el espíritu y mover sus piezas para cuidar de nosotros en todo momento.
Existe una herramienta poderosa y efectiva para resguardarnos de los problemas y los pesares, esta es la oración para la protección del mal. Por medio de ella podemos crear un vínculo con Dios, acercarnos a él y pedirle que nos cubra con su fuerza y su infinito poder, así como también a nuestros seres queridos.
Oraciones de protección poderosas
Hoy quiero compartir contigo estas efectivas plegarias para alejar el mal de tu vida, y la de tus seres queridos, para que la armadura y el escudo de Dios, del Arcángel San Miguel y el ángel de la guarda alejen la negatividad y cualquier daño que aceche a su alrededor.
Presta atención a cada una de las palabras, repítelas con esperanza, fe y amor en tu corazón, siempre confiando en la seguridad que proviene de Dios y de su hijo, Jesucristo. ¡Dios nos ama!
Oración para proteger contra el mal
Señor todo poderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, ante tu presencia Omnipotente vengo a rogar que nos libres de todo mal y nos des tu santa bendición, para que con ella, tus santos arcángeles San Miguel, San Rafael, San Gabriel y nuestro ángel de la guarda, nos acompañen en el sendero de la vida, protegiéndonos de toda circunstancia, peligro, intención, maldición o pecado que pueda hacernos daño, o peor aún, nos aleje de tu gracia.
Pido perdón por todos mis pecados y renuevo el propósito de enmendar mi vida, por la alianza de tu eterna misericordia y amor que nos otorgas cada día. Señor, aleja mi mente de malos pensamientos, de personas problemáticas, proyectos equivocados, más bien, ayúdame y guíame con tu eterno poder y sabiduría, para que mis pies siempre den los pasos según sea tu voluntad.
Te suplico que protejas el cuerpo, mente, alma y espíritu tanto míos, como de mi familia, que nos conduzcas en la vía y no sueltes nuestra mano. Por los méritos de tu palabra, yo sé que siempre nos oyes, siempre dispuesto a comprender y ayudar a tus hijos, te lo pido en el nombre de tu amado hijo, Jesucristo. Amén.
Oración al ángel de la guarda para la protección de la familia
Grandioso ángel de la guarda, cuida mis seres amados en cuerpo, mente y alma, aparta malas intenciones de nuestro lado e ilumina el camino por el cual andamos. Haz que nuestros pensamientos y actos estén en concordancia con los designios de Dios.
Guardián incansable, haz que mis hijos puedan pensar, razonar y entender cada hecho ocurrido, para que puedan tomar las decisiones correctas en todo instante. Aléjalos de vicios, pecados, personas que no les convengan y energías que repercutan en ellos, que sean tus alas benditas las que los cubra y los ampare.
¡Oh ángel de mi guarda!, acompaña a mi familia siempre con tu luz y bendición, para que no tropiecen nuestros pies en tentaciones o trampas del enemigo. Te doy las gracias porque sé que has estado siempre allí, que con tu gracias y cuidados, también me has sacado de peligros y problemas, por medio del amor que tienes a nuestro Señor y haciendo honor a su nombre.
Confió en tu protección y en que Dios me escucha, ya que como un Padre Amoroso, Él siempre atiende las suplicas de sus hijos, y conduce con bondad y magnificencia a cada uno de nosotros. Amén.
Oración corta a San Miguel Arcángel para protección
San Miguel Arcángel, custodio de las puertas del paraíso, protector divino de la injusticia, luz suprema en las tinieblas y esclarecedor ante la incertidumbre, defiéndenos en la lucha constante contra lo perverso, cuida nuestra vía del ataque del enemigo y defiéndenos de la retorcida mirada maligna del demonio.
Ampáranos, cúbrenos y protégenos en todo segundo, que Dios manifieste en ti su Poder, te rogamos humildemente que, como guardián divino y vigilante del mal, con la fuerza que Dios te ha conferido, expulsa a los seres malignos que vagan por el mundo y no permitas que se acerquen a nosotros nunca. Amén.