Un hijo puede llegar a incurrir en conductas peligrosas para él, esto es un verdadero dolor de cabeza y del alma para los padres, ya que muchas veces se sienten impotentes ante las acciones de él, y están seguros de que sus actos, al final, le causaran un daño muchas veces irreparable.
Todos los actos cometidos por un niño, joven o adolescente, tales como la rebeldÃa, desobediencia, groserÃas, malos tratos y desprecio hacia los padres y familiares que buscan ayudarle, pueden ser revertidos, dándole mansedumbre y paz a su alma, alejando de ellos las malas energÃas que repercuten en su espÃritu y lo dañan.
Ante esta situación, los padres cuentan con una herramienta muy poderosa, que puede llegar a obrar milagros en las vidas de las personas, estamos hablando de la oración y la plegaria, una fuerza que capaz de permitirnos comunicarnos con Dios y pedir que este obre en nuestras circunstancias, con su sabidurÃa y fuerzas infinitas.
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Oraciones para los hijos rebeldes
En la Biblia tenemos muchos ejemplos de hijos rebeldes, que con el auxilio de Dios, pudieron encaminar sus vidas al plan divino para bien de ellos. En estos casos, los progenitores deben recordar que al final, es el Señor el que conoce todos los caminos, y que cada uno de ellos tiene un sentido.
Asà pues, no queda más que recomendarte que juntes tus manos, y que al momento de rezar estas oraciones para ayudar a tu hijo rebelde, las hagas con el corazón lleno de esperanza y confianza, recordándole a tu problema lo grande y eterno que es Dios y que él es quien tiene el control sobre todo. ¡Animo y fuerza; Jesús está contigo!
Oración a Dios para un hijo en rebeldÃa
Señor, tú sabes plenamente los pasos que él debe seguir y los actos que debe cometer, mis fuerzas están socavadas entre tantas discusiones y conflictos, te ruego que guÃes sus pasos e ilumines su consciencia para que se acerque más a ti y a tu voluntad, y que hagas de mi un instrumento tuyo, dame la comprensión y la sapiencia correcta para aconsejarle y servir de ejemplo.
Hazle entender y discernir entre el bien y el mal, para que asà pueda ver la vida a través de tus ojos, aléjale de malos pasos y quÃtale con tu amor, las piedras del camino y las malas compañÃas que le inculcan ideas contrarias a lo que tú nos mandas.
Cúbrelo con la preciosa Sangre de tu Santo Hijo, Jesús, para que su corazón sea dócil a tu llamado, y para que comprenda lo mucho que le amamos y que aquà es su lugar de protección y cuidado, que se convierta y sea un hijo bueno y de muchos frutos para tu Gloria.
Pongo mi alma y corazón ante ti, y con esta plegaria repleta de fe y esperanza, te pido que concedas paz a su alma y apacigües sus pensamientos. Sé que te compadeces de mi dolor y sufrimiento, y siempre estarás dispuesto a orientarlo y amarlo en todo momento, porque eres un Padre amoroso, guÃa y protector. En el nombre de Cristo, Amén.
Oración para alejar malas compañÃas de un hijo rebelde
EspÃritu de verdad, limpia su trayecto de la gente malvada, mentirosa y manipuladora, jamás permitas que lo sonsaquen y lo hieran de ninguna manera, haz que sus maquinaciones sean descubiertas y puestas en la luz.
EspÃritu de Dios, tú que puedes conferir la sabidurÃa eterna de tus siete dones, aclara la mente y corazón de mi hijo, para que sea él mismo de tu mano, quien pueda darse cuenta de los malos deseos e intenciones de quienes lo rodean y los aleje de una vez por todas.
Saca de su vida aquellos individuos que lo atan y anclan a la perdición y el retroceso, dale el impulso para que logre avanzar y colocar su vida en orden, que sus hechos estén llenos de convicción y que abra las puertas de su alma a buenas personas, que se acerquen a él con honestidad y solidaridad.
Confió en que todo será asÃ, porque para Dios el Magnánimo todo es posible, y esto no es más que una pequeña traba que nos hará ver con nuestros ojos la majestad de su poder. Te lo ruego en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amén.
Oración de una madre a su hijo desobediente
Aleja las perturbaciones, rabias, dolor y molestias de su mente, aclara su mente y limpia el odio de su interior, hazlo amable, generoso y apacigua su inobediencia, para que asà reine la paz y la armonÃa entre él y yo.
Dios mÃo, misericordioso y espléndido, dota a mi indisciplinado hijo de un ápice de tu bondad, mansedumbre y acatamiento, sé su piloto en el viaje de su vida y que la maldad se elimine de su corazón, sana su espÃritu y haz tu voluntad, para que encaminado por ti, sea un hombre de bien, que acuda a ti cuando lo necesite y ayude a su prójimo.
Tu eres nuestro creador, todopoderoso, ruego que escuches mis plegarias y lo motives siempre a mejorar y entender que solo quiero el bien para sà mismo, ayúdame señor, dame la paciencia y la comprensión digna de tu amor, para servir de ejemplo y modelo para él. En el nombre de tu hijo Jesús, Amén.