Oración de bendición

Señor Dios, hoy junto mis manos y con mi alma llena de amor, quiero agradecerte por la bendición del alimento. Bendice, Altísimo, las manos que sembraron e hicieron posible que los tengamos en esta mesa. Otorga tus más valiosas bendiciones a la o las personas que han preparado esta deliciosa comida, y permite que podamos aprovechar y asimilar bien sus nutrientes y propiedades.Hacemos una petición para que no falte el alimento en la mesa de todas las familias del mundo. Enséñanos, Salvador, a ser agradecidos contigo y con las maravillas que haces en nuestras vidas. No permitas que seamos indiferentes para con nuestros hermanos y llena nuestro corazón de generosidad, así como nos enseñó Jesús con su ejemplo.

Esta petición la hago con total confianza en mi corazón, y con un profundo agradecimiento de que has llenado nuestra alma de tu maravillosa bondad. Amén.

¡Padre Santo! Antes que nada, quiero darte las gracias por las bondades que ya se me han sido otorgadas, por los favores concedidos y por todos los méritos que me has regalado durante mi andar en este valle.Acudo a ti en este momento para solicitar ante tu presencia, que me protejas, que me guíes, que me hagas mejor persona, un ser humano íntegro y de buenos valores, que seas parte de mi ser cada día de mi vida, y que me des tu santa bendición a mi y a los míos.

Aprecio tu mano protectora en cada paso que doy, tu infinito amor en mi hogar, familia, trabajo y relaciones laborales, soy plenamente consciente de la suerte y la dicha que he tenido por ser tu hijo y reconocerte. Quédate a mi lado, Señor, haz que sea posible seguir cosechando tus frutos y dones en mí. Amén.

¡Oh, Gran Dios! que para la salvación del hombre hiciste correr aguas en el sacramento de la nueva vida, escucha con piedad nuestra oración e infunde el poder de tu bendición sobré esta agua (debes hacer la señal de la cruz sobre el agua). Para que, sirviendo a tus misterios, asuma el efecto de la divina gracia. Que espante los demonios y expulse las dolencias, y así, al ser rociados, tus fieles sean liberados de todo daño. Que en los sitios que sea aspergida esta agua, no residan los espíritus del mal y se alejen todas las incidías del enemigo y sus mañas intenciones.

Haz que tus feligreses se mantengan libres por la invocación de tu Santo Nombre de todas las acechanzas, y que tu bendición descienda sobre sus almas. Te lo pedimos por nuestro Señor Jesucristo. Amén.

Padre nuestro, Todopoderoso, te pido que por tu Santo Nombre abras en mi vida todos los caminos para recibir tus bendiciones. Permíteme gozar de tu gracia en mi andar, que tu poderosa unción me cubra y multiplique todos los bienes, frutos y dones que he recibido desde mi nacimiento. Tú me conoces mi mente, mi alma y mi corazón, sabes que mis plegarias son hechas con fe, esperanza y certeza de que me escuchas, quita de mi camino cualquier obstáculo, atadura o tranca hacia la dicha, que todas las puertas del amor, salud, prosperidad, éxito, progreso y avance sean abiertas, para que pueda ser un mejor cristiano, ayudar a mi prójimo y disfrutar de mi vida de la mejor manera posible.

Aleja de mi la envidia, la miseria, el rencor, el odio y los problemas con otras personas, esto sentimientos me son ajenos y no me quitan el sueño.

Por el amor infinito de Jesús concédeme tus dones maravillosos, otórgame cosas preciosas y hermosas, pero que nunca me vea confundido por ellas y reniegue de tu poder. Te alabo y te glorifico, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Señor, en el silencio de este día que nace me acero hasta tu regazo para pedirte el don de la paz, sabiduría y fuerza. Hoy quiero mirar al mundo con los ojos llenos de amor, ser paciente, comprensivo, humilde, suave y bueno. Ver detrás de las apariencias de tus hijos, como los ves tú mismo, para así poder apreciar la bondad y el interior de cada individuo. Cierra mis oídos a toda murmuración, guarda mi lengua de toda maledicencia y deja que sólo los pensamientos que bendigan permanezcan en mí. Quiero ser tan bien intencionado que todos los que se acerquen a mí, sientan tu presencia y tu misericordia transformada en mis actos de valor, sean mi dirección y rasgo de mi personalidad.

Que cada mañana, tarde y noche, me revistas de tu buena voluntad y que tu luz sea mi farol en medio del camino. Déjame reflejar tu aura este día y todos los que vienen y bendíceme, Señor. Amén.

¡Gracias, Señor, ¡por habernos conservado la vida! Hoy te agradecemos por la luz, el aire, el agua, el pan y todos los beneficios que nos has concedido y nos concederás hoy. El agradecimiento inunda nuestra alma, porque nos has permitido conocer la verdad salvadora, nos has hecho tus hijos, y hermanos de corazón. ¡Gracias, Padre, ¡por la fortaleza que nos vas a dar para vencer cualquier tentación! Por ser nuestro soporte y no dejarnos cometer pecado alguno y para caminar hacia ti, siempre y en todo lugar. Por hacernos buenas personas, valerosos, humildes, generosos y serviciales.

Te ofrezco mi alma con su memoria, entendimiento y voluntad, y mi cuerpo con sus sentidos y cada movimiento hecho, cada paso dado, te otorgo mi destino, sé quién lo dirija y que tu gentileza y bendiciones nos guíen para que no fracase tu plan en nosotros. Amén.

¡Feliz el hombre que teme al Señor y valora sus mandamientos! Su descendencia será poderosa, los retoños de los justos serán benditos y sus bienes limpios de las garras del demonio. Habrá en su casa bienes y riquezas, y su honradez durará para siempre. Así pues, brillará una luz en las tinieblas para los rectos de corazón, los compasivos y clementes.Dichoso el que se compadece y da prestado, y administra con honradez sus negocios, pues nada logrará perturbarlo: el recuerdo del justo será eterno. No tiene miedo de malas noticias, pues en su corazón confía en el Señor; su corazón está firme, nada teme, al final verá a sus adversarios caer directo a sus pies.

Hazme, Dios mío, a tu imagen y semejanza, que no tema a dar a los pasos necesarios para lograr alcanzar mis metas y aspiraciones más profundas. Condúceme en el trayecto hacia un futuro próspero, lleno de oportunidades valiosas, inversiones inteligentes y abundancia en mi hogar.

El generoso en dar a los pobres, será honrado para siempre. Alzará la frente con dignidad. Por el contrario, el malvado lo verá y se irritará, le rechinan los dientes, se debilita; nada queda del desecho de los malos. Por eso, mi Dios, así como me será otorgada prosperidad, me sea dado el don de proveer trabajo y oportunidades a quien más lo necesiten. Amén.

Señor Jesús, tu que dijiste: “dejad que los niños vengan a mí”, y que, también afirmaste que el que se metiera con uno de estos pequeños contigo se enemistaba. A ti, mi buen Señor, vengo para pedirte la bendición para todos los niños, en especial a (mencionar el nombre del infante por el cual se reza). Cuídalos con tu poderoso brazo protector, aleja de ellos toda incidencia de vicio o maldad y mantenlos siempre a tu lado. Envía a tus ángeles custodios para que les protejan en cada paso que den, que solo personas buenas y honestas se crucen en su camino. Confunde y dispersa a aquellos que osen hacerle cualquier tipo de mal, sea físico, emocional, psicológico o espiritual.

Que sea tu Santo Espíritu quien siempre more dentro de ellos, los fortalezca y resguarde. Rezo esta plegaria con plena confianza y esperanza en tu benevolencia e infinito amor hacia los niños del mundo. Perdona mis pecados y escucha mi oración. Amén.

Salvador nuestro, tuyo es el poder y la gloria, tuya es mi vida, mis actos y mi ser entero, por eso, en este día de mi aniversario de nacimiento, te agradezco por un año nuevo de vida, por la oportunidad de despertar esta mañana y sumar un dígito más a mi edad, al tiempo que tengo existencia en este plano terrenal. ¡Gracias infinitas por haberme conservado la fe y la esperanza en mi espíritu! Te pido padre omnipotente, que me acompañes en este año que recién empieza, espero en ti para que pueda verse mi cuerpo fortalecido, mi salud fortificada, mis sentidos intactos y mi inteligencia aumentada, asimismo, protégeme de todo mal que me rodee y bendice mi vida entera.

Muchas han sido las enseñanzas que me has concedido el año que ha pasado; han sido momentos fuertes, todos superados con tu poder y sabiduría. También han sido bellos instantes de alegría, que aprecio y resguardo en lo más profundo de mi alma.

Espero con todo mi corazón que puedas acompañarme en la realización de mis metas y anhelos, y que estos siempre sean en tu santa voluntad y para mi bien. Esta petición la hago confiado en que me escuchas y me atiendes, te alabo y glorifico. Amén.

Señor mío y Dios mío, vengo a ti para orar por la persona que amo, mi amigo, compañero y mi novio. Espero que con el poder de la oración puedas iluminarle el camino, que la vía que transite esté limpia de riesgos, de peligros y que los problemas e inconvenientes los supere de la mejor manera, de tu mano, siempre con tu sabiduría y el entendimiento necesario para avanzar y hacer el bien. Te ruego, por favor, bendice y cuida sus pasos, aleja de él cualquier tipo de peligro que le haga daño de alguna forma, bien sea espiritual, emocional, físico o psicológico. Envía a tus santos ángeles para que custodien sus pasos a donde sea que vaya, ayúdale a cumplir sus metas y anhelos, para que por medio de ti pueda realizarse.

Te pido que alejes de nuestra relación cualquier persona, potestad, ente o energía maligna que quiera hacernos separarnos o alejarnos, mi amor por él es puro, sano y mis intenciones son profundamente buenas.

Perdóname por las veces que he faltado a tu palabra. Solicito tu escucha a mi plegaria, dale tu santa bendición y que su vida sea plena. Amén.

Señor Jesucristo, tú que has dado la vida por nosotros, te ruego que bendigas y llenes de tu paz este sábado que inicia. Espero que en este día pueda sentirme lleno de tu espíritu y favorecido por tu ternura, que todo lo que tengo planeado sea para bien, que cuente con tu apoyo y respaldo para cumplirlo. Suplico con mi corazón abierto que te quedes junto a mí y me guíes en mí caminar, que la alegría sea parte permanente las 24 horas y sea dado todo según sea tu voluntad. De igual manera, te pido perdón por mis pecados, puesto que reconozco que he sido pecador, pero hago el propósito de enmendar mis fallas y desaciertos, para con esto poder ser un mejor cristiano e hijo tuyo.

Te hago esta petición de bendición confiado en todo el poder de tu Gloria, siempre en alabanza de tu reino. En el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.

Oración de bendición corta

Padre benevolente, omnipotente y omnipresente, en primer lugar, acudo a ti para agradecer las bondades y cada uno de los favores que me han sido concedidos, en segundo lugar, te suplico que inundes de tu gracia mis sueños, anhelos, aspiraciones, metas, bienes, negocios y circunstancias, que tu bendición descienda sobre mí, sobre mis seres amados y sobre todos tus hijos.

Tú que todo lo que tocas lo haces prosperar, sanar y fructificar, tú que todo lo puedes, Señor, confiéreme el agrado de gozar de tu protección en cada paso dado en mi vida.

Bendice mi familia, mis hijos, mi pareja, hogar, trabajo, negocio, propiedades, amigos, vecinos, conocidos, y en general, todo aquello que sea posible de bendecir. Te lo pido en tu Santo Nombre. Amén.

Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, consiente que la bendición que viene de ti llene mi vida y espíritu. Bendíceme con tus frutos y dones, así como lo haces con tus Santos y Ángeles, para que pueda seguir mi camino como cristiano y ayudar a mis hermanos, que yo pueda ser reflejo de ti, y que otros vean en mí tu ejemplo de gracia y generosidad. Cubre con tu brazo protector mi tránsito, y déjame seguir experimentando las obras de tu gloria en esta vida terrenal. Junto a la Virgen María, haz que mi familia, hijos, relaciones y proyectos se vean materializados y perfeccionados, a cada instante con la dicha de ser hijo tuyo.

Te doy gracias por todo lo que hay en mi vida, por lo que me agrada y lo que no, pero que siempre sirve para tu plan perfecto. Te alabo y bendigo, Padre, yo sé que me escuchas mediante esta plegaria repleta de confianza en tu poder y tu magnificencia. Bendice a tu ciervo. Amén.

En el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Padre eterno, dueño de todo y todos, del tiempo y de la eternidad, por medio de esta oración te doy gracias por todos los bienes recibidos de ti en este año que ha pasado, te agradezco por permitirme estar vivo y para recibir el año que comienza. Bendice este nuevo año, que venga cargado de miles de momentos memorables, oportunidades invaluables y personas valiosas. Hazte presente en cada una de mis acciones y planes, guíame a los caminos que más me convengan y haz de mi tu voluntad.

Que mi familia se mantenga sana y unida, que abunde el pan en la mesa y que los negocios avancen a buen ritmo. Que la salud no sea un tema preocupante, que la sabiduría y la sapiencia no me abandonen y que seas tú quien decida todo paso dado en mi andar.

Dios, todo Poderoso y Eterno, te pido que me otorgues un corazón más bueno, con el cual pueda trabajar, avanzar y ayudar a mi prójimo cada que pueda. Que este año sea para tu gloria y para mi perfeccionamiento como cristiano y como ser humano. Tuyo es el poder y la gloria por siempre. Amén.

Señor Jesucristo, con mis todas mis ilusiones, fe y esperanza dispongo ante ti mi emprendimiento, por el cual me he esforzado mucho, y con gran paciencia he sacado adelante día tras día. Te pido la bendición para mi negocio. Cubre cada transacción, cuida y bendice a mis clientes, mantén mi fuerza intacta para trabajar hasta que mi mente y cuerpo lo permita, para así poder llevar el sustento a mi hogar, siempre de forma honesta y limpia.

Limpia de todo obstáculo o bloqueo, y que, por medio de él, muchas personas puedan beneficiarse. Ayúdame a solucionar los problemas de las personas con mi buen servicio, que cada producto cumpla su propósito.

Bendice a mis empleados y proveedores, que pasen los años y agradezcan cada día los frutos recogidos en cada relación de trabajo. En el nombre del Padre, que todo lo puede y todo lo hace prosperar y avanzar, sígueme concediendo prosperidad y abundancia con mi trabajo honrado. Amén.

Gran Padre amoroso, tú que tanto amaste a las madres, que hasta a tú hijo le condescendiste tener como madre a la mismísima Virgen María, me arrodillo ante ti para suplicar y orar por la bendición para todas las madres del mundo, especialmente la que me ha dado la vida. Salvador nuestro, tu muy bien sabes el valor, que tiene mi mamá para mí, cólmala de bendiciones, protégela de todo ápice de maldad que se le acerque, llénala de una flamante alegría y paz y regálale una óptima salud para disfrutarla por muchos años más.

Que sus sueños se vean realizados, que los anhelos de su corazón se hagan realidad. Te doy gracias Dios mío, por haber escogido una buena mujer para cumplir con esta labor en mi vida. Pido perdón por las veces que he sido ingrato o he fallado en mis responsabilidades como hijo.

Hago el firme propósito de seguir el ejemplo de Jesús, tu hijo amado, para cuidar y querer a mi madre, te hago esta plegaria con toda la fe y gratitud posible para solicitar tu bendición a las madres, que siempre vayan contigo de la mano. Amén.